Era necesaria. Su voz, su presencia, su respaldo. Porque si bien el ciclo de Diego Martínez lleva nueve partidos, la derrota ante Unión fue un claro paso atrás. Por eso, Juan Román Riquelme entendió que era el momento. Y salió a la cancha…

«Estamos contentos con el equipo, con el entrenador, creemos que en los partidos lo viene haciendo muy bien. Con Belgrano lo hicimos bien, con Central Córdoba también. Con River fue parejo. Es difícil para el técnico, que es nuevo, que no tiene tiempo de trabajo… Es un partido tras otro, los muchachos no son máquinas, es lógico que estén cansados y que un partido lo jueguen bien y otro no tan bien», argumentó Riquelme este momento irregular. Y tocó varios puntos claves de este presente…

El poco tiempo de trabajo: «Van 40 días. Yo no podría jugar nueve partidos en 40 días. Es muy poquito tiempo. Están jugando muy seguido los chicos. Hay que tenerlo en cuenta eso, también. Para mí lo más lógico es el torneo largo, porque te da más tiempo, más tranquilidad, los entrenadores pueden trabajar más tranquilos. Es todo nervios. Ya se fueron seis o siete entrenadores», agregó el presidente.

El juego de Boca: «¿Si me gusta realmente cómo juega Boca? Con Sarmiento me gustó, con Belgrano me gustó, contra River nos faltó tranquilidad en los últimos metros. Fuimos más claros el primero que el segundo. Hasta que fue Blanco al fondo, centro atrás y gol, porque para mí el fútbol no tiene secretos. El centro atrás es gol. Yo creo que el equipo va agarrando una forma, pero es complicado cuando empezás un campeonato, el capitán se te lesiona, cuando Medina y Equi Fernández se te van algunas fechas, cuando Cavani que es la estrella arranca lesionado y se vuelve a resentir… Es difícil, el equipo por momentos está jugando bien. La gente con Belgrano lo apoyó, porque el equipo le estaba dando buen juego».

La situación de Fabra, hoy relegado: «Bueno puede ser el mejor lateral, pero el que decide es el técnico. Y nosotros estamos muy felices de como lo hace Blanco, como lo hace Saracchi, como lo hace Fabra. Yo amo a los jugadores que tenemos en nuestro club. Siento admiración por los futbolistas, sean de mi club o de otro club. Nosotros no usamos esa palabra de quién está castigado y quién no».

Las elecciones del entrenador: «El equipo lo arma Martínez y a veces pondrá 11 y estaremos de acuerdo y otras veces no. Del equipo que forma Russo, Battaglia, Ibarra y Almirón y ahora del que le toca a Diego», agregó, dejando en claro que no siempre está en sintonía con la formación elegida. Y luego, más adelante, volvió sobre el tema: «Yo soy hincha, me gusta mucho el fútbol y muchas veces no estoy de acuerdo con los equipos que arman nuestros entrenadores pero ellos son los que deciden y nosotros estamos muy contento del técnico que tenemos. Sabemos que lleva poquito tiempo y que con calma las cosas van a estar bien. En cancha de San Lorenzo con Sarmiento lo ha hecho bien, con Belgrano, con Central Córdoba también, pero con Unión jugó mal. No me cuesta nada reconocerlo y sé que los muchachos piensan lo mismo».

La calidad del plantel ante las críticas: «Nosotros estamos muy contentos de la llegada de Zenón, parece que juega acá en el club hace muchos años, Lema lo mismo y Blanco igual. Porque sino después empezamos y todo lo bueno que se hace parece que no sirve. Y el hincha escucha y quiera o no, a veces se le traslada un poquito de nervio. Nosotros estamos contentos con el plantel que tenemos, a mí me toca hoy estar en otro lugar y estamos para intentar armar el plantel lo más fuerte posible pero después el que decide es el entrenador».

La presión que tiene Cavani por convertir: «Es con él mismo. Él viene primero y se va último todos los días. En la semi con Palmeiras, fue el mejor con Pol. Cuando nosotros nos quedamos con uno menos, fue como un jugador de fútbol jugando en su barrio. Como diciendo, estoy solo, dénmela a mí, me van a hacer falta, voy a aguantar. Hizo un partido extraordinario y fue el culpable de que nosotros juguemos la final. Esperemos que pueda seguir sumando minutos y dándonos más alegrías. Hace todo lo que tiene que hacer un delantero. Yo siento debilidad por los jugadores y él es cómo cuando en su momento vino Trezeguet (a River), que yo decía que el que es número nueve o delantero que tiene que mirar a Trezeguet cómo la rebota o cómo se perfila, y hoy el que es delantero tiene que mirar a Cavani.», aseguró, en otro gran respaldo al Matador.

Y siguió, con referencia al partido con Belgrano, cuando cortó la sequía: «El otro día el cabezazo del primer tiempo que tapa el arquero, el movimiento que hace Cavani que sale corriendo desde el fondo… Hace todo lo que tiene que hacer un delantero. Salta bien y rebota bien. El vive del gol. Por eso creo que está entre los diez máximos goleadores del fútbol mundial. Él enseña todos los días y está muy bien, y enseña no sólo dentro de la cancha, sino también fuera, y ojalá que todos los chicos puedan aprender de él. Incluso hasta Benedetto y Marcos, que también han tenido una carrera muy buena».

Cómo le iría a él con el VAR: «Soy de pensar que hoy por hoy me costaría mucho jugar. No sé de qué jugaría. Porque el que juega en mi posición cada vez participa menos o lo mandan a jugar a un costado o a otro, y con el tema del VAR me anularían todos los goles, por los brazos, los empujones. Hasta me resulta raro ver que un defensor te marque con las manos atrás. Yo me pregunto… ¿cómo hacen? Si defendés con las manos atrás te enganchan para un lado y para el otro y te caés. Pero bueno ahora se marca con las manos atrás. Ahora se ponen las manos atrás y antes yo los empujaba. Y aparte el 5 que era el que te pegaba la patada ahora se agarra la cara. El fútbol de hoy es un quilombo», declaró.

Y agregó, en ese sentido: «Antes se jugaba como en el barrio y eso lo hacía más divertido o lo hacía sentirse a uno más cercano. Vos imitabas al que jugaba porque era parecido a lo que hacías vos con tus amigos, jugar al fútbol tiene también un poco de maña y de hacer trampa. Tampoco un empujón grosero pero yo a veces miro y digo: ‘para mí esto no es foul. Eso no es foul, es una maña». Y hoy ya no se puede ni rozar al contrario. Yo creo que para cualquier falta pedimos roja. Y estamos pensando en cómo sacar ventaja tirándonos al piso y que el árbitro amoneste a uno o eche al otro. Y creo que todos ayudamos a que el fútbol sea cada vez un poquito peor. Yo tenía mis mañas…».

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here