Anfield está de fiesta. El Liverpool le ganó 2-0 al Arsenal en el Emirates gracias a los dos golazos del portugués Diogo Jota, y jugará la final de la Copa de la Liga. ¿La mala? en dicha instancia deberán enfrentar al último campeón de la Champions: el Chelsea.
La velocidad y el buen juego característico del fútbol inglés se vio totalmente reflejado en el encuentro. La velocidad de los extremos, los centros precisos de los laterales (Alexander Arnold dio los dos pases de gol) y el buen pie del mediocampo, hicieron que sea un partido más que vistoso.
Diogo Jota: el hombre de la noche (REUTERS/Ian Walton)
El primer tiempo arrancó con todo, digno de una semifinal. Después de varias idas y vueltas, y con un dominio constante de los visitantes, a los pocos minutos del pitazo inicial le anularon un gol a Matip, que definió en posición adelantada.
A los 19’, Diego Jota la recibió en tres cuartos de cancha y frotó la lámpara: dejó a tres rivales en el camino y, cuando todos pensaban que iba a definir cruzado al segundo palo, el portugués colocó la redonda a la derecha del arquero, que nada pudo hacer porque ya se había ubicado para volar hacia la otra dirección. Sí, la única clara que tuvieron los de Klopp el primer tiempo, la mandaron a guardar.
Luego, el asunto se fue apagando. El Liverpool dominó pero lo más peligroso lo fabricó el Arsenal, que a diferencia de su contrincante, nada pudo hacer para modificar el marcador.
El segundo capítulo, por su parte, fue frenético y se jugó en las dos áreas. A los 58’, la defensa de los Gunners se durmió y tras un centro de Alexander Arnold, apareció Konaté, que ante la floja marca de Saka, cabeceó sin complicaciones pero la redonda terminó impactando en el palo.
A los 77’ le tiraron un pelotazo a Jota, que la paró de pecho en la puerta del área y definió por arriba del arquero con una clase impresionante. Eso sí, fue con bastante suspenso porque tuvieron que parar los festejos para ir a revisar la jugada al VAR por un posible fuera juego, que finalmente no hubo y derivó en el delirio de los hinchas visitantes.
La foto del golazo de Jota (AP Photo/Matt Dunham)
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La final ya tiene fecha
Con un injusto 2-0 en las pantallas gigantes del Emirates Stadium, el árbitro decidió ponerle punto final al asunto y decretó la victoria de los dirigidos por Jurgen Klopp, quienes deberán medirse ante el Chelsea el 27 de febrero en Wembley para decretar que equipo será el campeón de la Copa de la Liga Inglesa.
