El mal estado de las rutas en Neuquén y la falta de equipamiento adecuado para el mantenimiento vial han generado preocupación, mientras el gobierno provincial pide hacerse cargo de las rutas nacionales en un contexto de accidentes y pérdidas humanas.

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con Darío Irigaray, director de Vaca Muerta News, quien expresó que el tema vial en la provincia “es recurrente debido a los numerosos accidentes que se registran a diario”

Desafíos en el mantenimiento de las rutas de Neuquén

Según el entrevistado, el gobierno provincial ha manifestado su interés en asumir el control de las rutas nacionales, pero este pedido ha generado dudas, ya que la provincia no cuenta con los recursos necesarios para garantizar un mantenimiento adecuado.

Según Irigaray, «la provincia de Neuquén tiene capacidad de tapar un pozo, pero no tiene el equipamiento necesario para hacer un mantenimiento serio«.

Falta de infraestructura y equipamiento vial

El problema es evidente cuando se observa el estado del equipamiento en la provincia. «En Añelo tienen un carretón que usan para transportar las máquinas en toda la provincia”, dijo Irigaray y mencionó que, “cuando ves el equipamiento y el personal, realmente no tienen capacidad operativa para lo que existe«.

Además, el entrevistado mencionó que la falta de maquinarias y personal capacitado limita gravemente las posibilidades de mantener en condiciones las rutas de la provincia.

El impacto de la falta de mantenimiento en la seguridad vial

En cuanto a la situación actual en las rutas provinciales es alarmante. Según el entrevistado, «las banquinas están descalzadas, hay pozos, y la cantidad de siniestros viales y pérdidas humanas es una constante. No da abasto«. Los accidentes siguen ocurriendo debido al mal estado de las rutas, lo que afecta tanto a los conductores locales como a los de otras provincias que transitan por allí.

El caos en el tránsito de las rutas principales

Además, Irigaray sostuvo que la falta de mantenimiento afecta directamente la circulación, especialmente en rutas de alta carga de tránsito. Y agregó que en una conversación reciente con el intendente de Campo Grande, localidad de Río Negro, se destacó que » pasan 7.000 camiones o 7.000 vehículos por día por ese acceso».

En continuidad con el tema, el entrevistado mencionó que la situación se vuelve aún más peligrosa cuando los camiones circulan a baja velocidad, generando grandes atascos en la ruta y poniendo en riesgo a los conductores. “Los horarios de mayor tráfico se convierten en un caos, con los vehículos intentando sobrepasar a los camiones y generando accidentes”, añadió.

Las rutas secundarias: otro desafío sin resolver

Además de las rutas principales, las rutas secundarias que atraviesan los yacimientos de la provincia también enfrentan grandes problemas. “Muchas de estas rutas eran caminos rurales, que no estaban preparados para soportar el alto volumen de tráfico generado por la actividad petrolera”, dijo Irigaray.

La falta de respuestas por parte del gobierno provincial

Pese a la gravedad de la situación, las respuestas desde la provincia no han sido suficientes”, dijo Irigaray y mencionó que, “ya pasó más de un año de gestión y no vemos resultados”. Y remarcó que a las operadoras les dicen que tienen que poner dinero, pero “ellas ya están pagando por la concesión y por otros costos, como regalías«.

Además, el entrevistado criticó que, a pesar de los recursos que ingresan a la provincia, no se invierten en obras de infraestructura vial. “Se cuestiona la intención del gobierno provincial de tomar el control de las rutas nacionales cuando las rutas provinciales siguen en pésimas condiciones”, siguió.

Rutas provinciales y el debate sobre el control de las rutas nacionales

Irigaray explicó que el conflicto se agudiza cuando se menciona que muchas de las rutas en la provincia de Neuquén son, de hecho, provinciales. Y agregó: «Hoy las rutas de Vaca Muerta son todas provinciales, no hay rutas nacionales que la atraviesan”.

Y siguió: “Son absolutamente 100% ruta 51, ruta 7, ruta 8, ruta 6. Todas son provinciales«, afirma el entrevistado. Este detalle revela la discrepancia entre las intenciones del gobierno provincial y la realidad de las rutas existentes en la región.

Para finalizar, el entrevistado agregó: “Mientras el gobierno provincial busca asumir el control de las rutas nacionales, la provincia debe primero abordar las deficiencias de su propio sistema vial para evitar más accidentes y tragedias”.