El Corinthians no está en un buen año, porque en la Copa Libertadores se quedó afuera en fase de grupos. En el Brasileirao, el Timao está lejos de pelear el título, tanto que todavía no aseguró su permanencia en la Serie A. Por eso, los corazones de los torcedores del equipo paulista no están para chistes. Pero el arquero Cassio, un símbolo del equipo, se mandó una jugada que alteró el ritmo cardíaco de todos en el estadio Arena.
¿Qué ocurrió? Durante el match ante Atlético Mineiro, hubo un tiro libre indirecto a favor de los de Belo Horizonte y el remate fue un centro que el uno esquivó para dejar entrar en el arco. Nadie entendía nada, pero el árbitro Braulio da Silva Machado seguía con la mano izquierda levantada: debían tocarla dos futbolistas antes de que la pelota ingrese al arco. Por eso, sancionó salida para los paulistas.
¿Qué necesidad de asustar a los hinchas y correr riesgos? El partido terminó 1 a 1, resultado al momento de esa jugada, con goles de Ángel Romero (ex San Lorenzo) para el Timao y de Paulinho para el equipo de Luiz Felipe Scolari.
Fausto Vera fue local en el Corinthians, mientras que Saravia y Zaracho jugaron en el Galo.
