En una sartén pochamos la cebolla y el pimiento troceados, añadiendo el atún y la salsa de tomate para crear el relleno de la lasaña. Salpimentamos y dejamos que se temple antes de comenzar a montar la lasaña.
Colocamos las placas de lasaña en remojo para que se ablanden. A continuación las ponemos en una fuente de horno, con una capa de salsa bechamel debajo para que no se pegue. Podemos comprarla hecha o seguir esta receta de bechamel casera exquisita.
Comenzamos a construir, una lámina de lasaña y una capa de relleno. Cuando lleguemos al final cubrimos con bechamel, la metemos en el horno 15 minutos a 190ºC, espolvoreamos el queso y gratinamos hasta que se ponga doradita.