Una situación tan absurda se vio en el Campeonato Amazonense de Brasil que todas las sospechas apuntan a una manipulación de resultados. ¿El partido? Atlético-AM y Sul América. ¿El protagonista? Júlio Campos, del local. Cuando su equipo perdía 3 a 1, a los 44 minutos del segundo tiempo, la metió deliberadamente en contra, tras recibir un pase de un compañero.
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Nadie entendió qué había pasado en el estadio Carlos Zamith. El futbolista ya fue expulsado del club, junto a algunos compañeros, y la Federación anunció que hará una denuncia legal para conocer qué sucedió. El presidente del club, Henrique Barbosa, se negó a hablar con la prensa, pero el club sacó un comunicado.
«Atlético Amazonense hace público para informar que no condona actitudes antideportivas, abrirá procedimiento interno para investigar los hechos en el partido contra Sul América, los implicados ya fueron desvinculados del club».
«Estamos a favor del juego limpio y responsable, no admitiremos nada que sea contrario a ello».
Muy raro lo que pasó…
