Con el invierno a la vuelta de la esquina y los preparativos para la Navidad, desde la búsqueda del regalo perfecto a la decoración del árbol, desbordando nuestra agenda, este mes de diciembre también es un buen momento para pasar unos días en Madrid. Ya sea para hacer unas compras, para contemplar de la iluminación de las calles o, simplemente, para visitar la ciudad en estas fechas tan especiales. Y para que la experiencia sea más redonda, te traemos los ocho restaurantes perfectos y disfrutes de la buena gastronomía.
Porque la escena culinaria madrileña es un universo tan cambiante como suculento, con propuestas van desde la cocina de autor que fusiona lo mejor de la gastronomía vasca, al brunch de moda en la capital, pasando por la tortilla de patata que a todo el mundo le gusta o esa hamburguesa que, sí o sí, tienes que probar. Porque Madrid es para todos los gustos y su oferta gastronómica también.
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Así que si tú también quieres conocer los restaurantes que no te puedes perder cuando visitas Madrid, toma nota de esta lista de 8 locales en los que seguro que terminarás chupándote los dedos.
La tortilla de kokotxas de Infame, uno de los platos estrella de este restaurante ubicado en La Latina.
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Infame. Calle Cava Alta, 4.
A unos pasos de la Plaza Mayor, este restaurante de raíces vascas ubicado en el distrito de La Latina acaba de celebrar su cuarto aniversario afianzándose como referente gastronómico de la buena cocina. Porque clásicos como su tortilla de kokotxas de bacalao, o su bacalao al pil pil, sus rabas de potera estilo Castro Urdiales o su careta de cochinillo se han convertido en esos platos que hay que probar para degustar la buena cocina hecha con cariño, de la mano del chef vasco Álex Santamaría.
Con una bodega que recorre la geografía española y una carta de coctelería creada por Eider Megino, una barra animada en la que no faltan los habituales y un comedor con capacidad para cuarenta personas, Infame es una propuesta deliciosa y cercana que hay que conocer para descubrir que hay más gastronomía que la que arrasa en las redes sociales. Y ahora, en temporada de caza, su exquisita cartas se completa con pato azulón, codorniz, jabalí y ciervo, para que no falte en la mesa lo mejor de cada momento del año.
Algunos de los platos que componen la carta del restaurante madrileño Bar-Vi
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Bar-Vi. Calle De Moratín, 40.
Vinos naturales y cocina de autor con acento italiano son las señas de identidad de este restaurante ubicado a unos pasos del Museo del Prado en el que la cocina se nutre de la riqueza del Mediterráneo y toques de sabores caribeños para crear una carta tan personal como interesante, ideal para compartir y adentrarse en una cocina que no entiende de clichés. Tan escueta como intensa, su propuesta arranca con imprescindibles como el pan de masa madre o las olivas sicilianas, para abrir boca acompañada de un cóctel o de uno de sus interesantes vinos.
Clásicos con un toque propio, como las zanahorias braseadas con hummus di cannellini y chimichurri, o el roast beef tonnato, imprescindibles de la cocina italiana como el risotto, en este caso con manzana verde y gorgonzola, o la pasta, como los ñoquis con ragú de pomodoro son algunas de sus propuestas, entre las que también encontramos pesca del día y una exquisita carrillera al vino con parmentier trufada. Aire fresco en la escena gastronómica de la capital, para confirmar que otra forma de vivir la cocina es posible.
El coquelet de corral asado del restaurante georgiano Nunuka.
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Nunuka. Calle Libertad, 13.
La cocina georgiana ha ganado numerosos adeptos en los últimos tiempos y el principal culpable es este restaurante del barrio de Chueca. Un pequeño bistró funfado por Nino Kiltava que, en unos años, nos ha demostrado el placer de degustar el plato georgiano por excelencia, el Khachapuri, acompañado de uno de los exquisitos vinos traídos desde la región del Cáucaso. O de descubrir sus praxis guptebi, unas deliciosas albóndigas de puerro, o sus badrijani nigvzit, unas suculentas berenjenas rellenas d epasta de nueces.
Principales como la paletilla de cordero lechal a baja temperatura, el coquelet de corral asado con salsa cremosa de especias georgianas y puré de patata con queso ahumado, los canelones de pavo o la pluma ibérica asada son otras de las propuestas culinarias que han conquistado a decenas y decenas de amantes de la buena cocina. Y que han disfrutado tanto con la experiencia que no han dejado de recomendarla, y repetir.
La hamburguesa de Pacífico Smash Burguer, una de las hamburgueserías imprescindibles de Madrid.
Instagram: pacifico_madrid
Pacífico Smash Burguer. Calle Conde de Xiquena, 2.
A medio camino de la Gran Vía y el Paseo de Recoletos se encuentra esta hamburguesería que acaba de abrir dos nuevos locales y que se ha convertido en un referente para los amantes de la versión más moderna de la elaboración culinaria llegada de Estados Unidos. La carta, además de la opción vegana, solo ofrece dos opciones, la clásica y la Pacífico, pero no se necesita más cuando se acompaña de sus deliciosas patatas fritas o, para los más atrevidos, sus jalapeño poppers.
Concurrido en las horas punta, como cualquier lugar en el que se disfruta de la comida, si el día acompaña es una excelente opción pedirlo para llevar y disfrutarlo en un banco de los alrededores o el propio Paseo de Recoletos. Que nada nos impida disfrutar de una de las mejores smash burgers de Madrid que, sin duda, te dejará con ganas de volver una y otra vez.
Una de las pizzas de Toto e Peppino, el restaurante italiano favorito de los famosos en Madrid.
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Toto E Peppino. C/ Fernando VI, 29.
Reconocido este mismo año con el Arcimboldo d’Oro que premia la pura esencia de la cocina italiana, este restaurante apuesta por la calidad, la tradición y el arte de la pizza napolitana para conquistar los paladares de sus comensales. Local favorito de famosos y no tanto, su carta es una cuidadosa selección de los platos más representativos de la cocina italiana, desde sus entrantes, con la parmigiana de berenjena o su burrata rellena de pesto, a los favoritos de los comensales.
Espaguetis a la carbonara, uno de los preferidos de los habituales, lasaña a la boloñesa o ziti al ragú napoletano, para aquellos que no renuncian al placer de un buen plato de pasta, o pizzas como la diavola, la napoletana, la de pistacho o la Adele, una de las más solicitadas, han hecho de este local del madrileño barrio de Las Salesas un lugar de paso obligado para los amantes de una de las cocinas más famosas del mundo.
La Martinuca. C/ Barquillo, 11.
Las tortillas de patatas de las que habla toda la ciudad, y una de las más vendidas en el exitoso universo del delivery madrileño tienen local en el barrio de Chueca y son un opción perfecta entre la mañana de museos y la tarde de compras en el centro. Especialmente ahora que han ampliado su oferta con las tortillas de invierno y a la clásica, con o sin cebolla, la de cebolla confitada y la de butifarra del perol se suman la tortilla de sobrasada, la de trufa y la de pimientos.
En su carta, a las elaboraciones estrella se unen clásicos como las croquetas, la ensaladilla rusa o las bravas de la casa, los torreznos o las albóndigas caseras. Una apuesta por la cocina tradicional en la que su exquisita hogaza de pan payés redondea la experiencia. Porque, a veces, una chica solo necesita una tortilla de patatas bien hecha para ser feliz.
Preciados 33. Calle Preciados, 33.
A unos pasos de la plaza de Callao, y muy cerca de la Puerta del Sol y Gran Vía, se encuentra una experiencia gastronómica tan original como tradicional: un buffet a la carta de comida española. Cocido madrileño, arroces y tradición se encuentran en la propuesta gastronómica de este local de tres pisos en el que la calidad de sus elaboraciones y su buen servicio rompen con los tópicos asociados a este formato y hacen de la comida o la cena una experiencia inolvidable.
Flores de alcachofa, torreznos con patatas revolconas, vieiras a la brasa, chanquetes crocantes sobre huevos fritos o patatas bravas son algunos de los entrantes que aparecen en su carta, en la que también encontramos pescados como lubina a la bilbaína o una fritura de mar, y carnes como el entrecot a la plancha o la milanesa de ternera. Cuatro arroces, una fideuá y el cocido madrileño en dos vuelcos completan la propuesta de este restaurante ideal para los encuentros gastronómicos familiares propios de estas fechas.
El comedor del restaurante asiático Lelong Asian Club.
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Lelong Asian Club. Carrera de San Jerónimo, 9.
Referente de la cocina asiática en Madrid, este sofisticado restaurante ubicado en la afamada zona de Canalejas es una apuesta segura a la hora de disfrutar de la gastronomía del lejano continente al más alto nivel. Para celebrar este prestigio, alcanzado tras dos años de suculentos platos y una renovación constante, Lelong ha actualizado este otoño su propuesta culinaria, inspirándose en la riqueza gastronómica asiática, con influencias que van desde Japón y China, hasta Tailandia, Corea y Singapur.
Platos concebidos para capturar la esencia de cada origen a través de materias primas de primera calidad y técnicas culinarias contemporáneas que reimaginan recetas tradicionales. Con creaciones como la ensalada de pato con jamón de pato, polvo de foie, canónigos y vinagreta chica, los Tood Man Pla, pastelitos tailandeses de pescado y marisco con curry rojo, lima kafir y judía verde con salsa agridulce de pepino, cacahuetes y chilies, las carrilleras de cerdo ibérico al curry verde con coco seco o el pollo al limón de Lelong, además de vivir una experiencia única disfrutaremos de una deliciosa gastronomía al más alto nivel.
Las tortitas del brunch del Dani Brasserie, uno de los restaurantes del Four Seasons Hotel Madrid.
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Dani Brasserie, Four Seasons Hotel Madrid. Calle Sevilla, 3.
Especialidades de la cocina mediterránea y los mejores platos del chef reconocido con estrellas Michelin se encuentran en la experiencia gastronómica de moda en la capital, el brunch. Y si queremos llevarla al máximo nivel qué mejor que disfrutarla en un entorno tan exquisito como el del Four Seasons, en el que la sofisticación y el lujo se trasladan a cada plato.
Disponible todos los domingos, de 13 a 16h., la propuesta del Four Seasons a manos del chef marbellí nos permite disfrutar de tres menús diferentes, en los que podemos degustar el selecto buffet dispuesto a lo largo de la barra del restaurante, una selección de platillos a la carta y de bebidas, además de los platos de pescado, carne y arroz del día y clásicos como los huevos benedictine o las tortitas. El placer de disfrutar de la buena cocina en una de las vivencias culinarias más exclusivas de Madrid.
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