En muchas sesiones de gimnasio los antebrazos se quedan de lado, y es que cuando nos ponemos a trabajar los brazos, son los bíceps, tríceps y hasta los hombros los que se llevan toda la atención, sin embargo, la zona de los antebrazos suele caer en el olvido.
Por fortuna, Jeff Nippard, entrenador fitness certificado y fundador de su propia academia de entrenamientos, ha compartido tres ejercicios esenciales para que tus antebrazos crezcan con rapidez y se conviertan en un punto fuerte, no en ese aspecto que tratas de disimular.
El primer ejercicio que destaca es el que trabaja la flexión de muñeca con peso, con las palmas hacia arriba, los antebrazos apoyados y las muñecas colgando ligeramente para permitir que el peso «caiga» al límite de tu rango.
Esa sensación de «dejar que el peso caiga» es clave: no se trata solo de subir y bajar como un autómata, sino de manejar el control, sentir el músculo, esa parte final donde normalmente nos relajamos. Este movimiento «colgado» al final de la muñeca contribuye a ese detalle que cambia la forma del antebrazo y ayuda a que deje de parecer un palo fino: lo ensancha, lo define, lo hace destacar.
El segundo ejercicio que propone Nippard es la extensión de muñeca, que trabaja la parte opuesta del antebrazo. Con el peso a los lados, muñecas que rotan «hacia fuera» o extienden la mano, evitando usar impulso, este ejercicio asegura que la parte trasera del antebrazo no se quede rezagada.
El tercer ejercicio que recomienda es el curl de agarre invertido, es decir, trabajar con las palmas hacia abajo o agarre tipo pronado, lo que activa más el músculo braquiorradial que entra justo entre el bíceps y antebrazo y mejora el grosor global de esta zona.
Más allá de los resultados que prometa este ejercicio, hay algunas recomendaciones que se tienen que tener en cuenta: calentar bien muñecas y antebrazos antes de lanzarte, porque es una zona que soporta bastante estrés y rara vez recibe el cariño del calentamiento.
También es conveniente ir de menos a más: no trates de levantar una barbaridad desde el minuto uno; mejor enfócate en una buena técnica y en cumplir con un rango completo.
Si estás cansado de que esos antebrazos «finos» te quiten la proporción que buscas, aplica estos tres ejercicios y ponlos de verdad en tu rutina. Con constancia, control y ganas, podrás lucir antebrazos de alto impacto.
Foto de Ramy Mamdouh en Unsplash
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