Hay mucha vida más allá de las tortillas para salir del paso con una cena nutritiva pero rápida. Voy a darte una idea: mete los huevos al horno junto con unas verduras. Te lo digo con conocimiento de causa porque estos huevos al horno con calabacín son un vicio, además de fáciles, sanos y muy agradecidos. Una de esas recetas que funcionan tanto un martes cualquiera como si tienes invitados inesperados y tienes que improvisar. Aunque, si no tienes o no te apetece encender el horno solo para esto, también puedes usar una sartén tapada hasta que se cuajen. Eso sí, aunque el plato queda bueno, no es lo mismo que el gratinado del horno, que lo eleva a otro nivel.
Empezamos precalentando el horno a 200 °C. Mientras, engrasamos dos cazuelitas (o una fuente pequeña) con un poco de aceite. También, cortamos el calabacín en cubitos y lo mezclamos con la cebolleta picada, el vinagre, sal, pimienta y las especias al gusto
Repartimos la mezcla en las cazuelitas ndividuales y horneamos unos 10 minutos. Después, tapamos las cazuelas y dejamos hornear otros 8-10 minutos más. Transcurrido este tiempo, hacemos un hueco en el centro y cascamos un huevo dentro de cada cazuela. Por último, salpimentamos un poco y volvemos a meter al horno.
Horneamos sin tapar, en esta ocasión, y mejor si es con gratinador. Dejamos que se hagan hasta que la clara esté cuajada pero la yema siga líquida, lo que llevará unos 8-10 minutos aproximadamente. Finalmente, espolvoreamos perejil fresco picado por encima y servimos mientras el plato está todavía caliente.
Evidentemente, es mandatorio acompañar estos huevos con un buen pan artesano de calidad. Además, si también servimos una ensalada completa al lado, tendremos en la mesa una cena ligera pero de nivel.
Foto de portada | Vitónica
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