Aloña Fdez. Larrechi

Hace unos meses tuve la suerte de leer Tatá, agradecida por la oportunidad que me daba la editorial Duomo e intrigada por lo que me iba a encontrar en una novela que llegaba con la premisa de ser «el libro de la reentré» en Francia. La lectura no me duró más de una semana, pero durante todo este tiempo he recordado sus personajes y las tramas en las que se veían envueltos con cariño. Y también he estado deseando que llegase el 26 de agosto, porque desde hace unos días es la novela que no dejo de recomendar a mi madre y mis amigas.

Si te atrapó La cartera y has disfrutado de la última novela de su autora, La fragancia del mañana, Tatá te va a encantar. Si te gustan las historias que te sumergen en un misterio con elegancia y con encanto, no vas a poder dejar de leerla. Si buscas personajes a los que querer como si los conocieses, este es tu libro. Y si eres de las que se emociona con los relatos que además de cabeza tienen corazón, Tatá es lo que necesitas, pero es probable que en algún momento quieras tener un kleenex a mano.

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De lo que estoy segura es de que, el libro que llega hoy a las librerías de la mano de Duomo Ediciones dejará un precioso poso en tí y estarás deseando recomendarlo y comentarlo. De momento yo te cuento por qué Tatá se va a convertir en tu novela favorita del final del verano, del regreso a la rutina o, simplemente, de este momento de nuestras vidas en el que, a veces, todo parece demasiado oscuro.

Un misterio rodeado de preguntas y recuerdos

Escrita por Valérie Perrin, y compuesta por casi 600 páginas, el misterio que envuelve la novela, el punto de partida de la historia, nos lo encontramos en la evocadora portada de Tatá. Porque, un buen día, Agnès descubre que debe volver a Gueugnon, el pueblo de su infancia, en el que la tía Colette cuidaba de ella, para reconocer su cuerpo porque acaba de morir. Pero Agnès sabe que eso no es posible, porque la tía Colette falleció hace tres años. O eso, al menos, era lo que todos pensaban.


Portada de Tatá, la novela de Valérie Perrin que no dejarás de recomendar en cuanto la leas.


Duomo

Desde ese momento hay dos preguntas que persiguen a Agnès: ¿quién es la mujer a la que enterraron entonces? y ¿por qué Colette hizo creer a todo el mundo, durante tres años, que estaba muerta? Ella, que es directora de cine y trata de superar su divorcio mientras su marido y su nueva y joven novia ocupan las páginas de las revistas del corazón, decide que tal vez sea una buena idea dejar París unos días y viajar a Gueugnon para resolver el misterio. Y, claro, para enterrar a su tía.

Allí, las preguntas sin resolver se unen a los recuerdos. La casa en la que su tía, la habitación en la que ella dormía, la tienda que la mujer regentó durante décadas y en la que vivió momentos que fueron fundamentales en su vida… Cada rincón de los espacios en los que se desarrolló la vida de Colette alberga un recuerdo, un pasado. Y Valérie Perrin los aprovecha para viajar en el tiempo y contar la historia de esta particular mujer, desde que nació en el seno de una familia muy humilde hasta el momento en el que decidió hacer pasar por ella a otra mujer.

Una narradora inesperada

Con su viaje, Agnès también tendrá la oportunidad de reencontrarse con viejos amigos, de conocer a los vecinos de Colette, los que simplemente le veían desde la ventana y los que tuvieron la fortuna de conocerla mejor, y de revisitar lugares en los que los recuerdos se agolpan, para bien y para mal. Y luego está la maleta con cintas de casette. Porque Colette era una mujer que pensaba en todo, también en contar su propia historia, aunque ya no estuviese ella para hacerlo.


Valérie Perrin, autora de Tatá, uno de los libros de la reentré literaria.


Duomo


Tatá no estaría completa sin su suspense, porque Colette tenía una buena razón para hacer lo que hizo cuando alguien se quedó con su identidad. Y de ahí llegará la dosis de peligro que hace tan redonda la novela de Perrin, porque aporta tensión a la historia, pero también porque aprovecha para revelar una dolorosa realidad que durante generaciones vivieron centenares de mujeres.

A través de la vida de Colette, Agnès será capaz de conocer y abrazar la suya propia, descubriendo que por muy sencilla que fuese la existencia de su tía, ella también tenía una historia que contar. Y será su voz, esa que sus recuerdos asocian a su infancia o a su propia hija siendo un bebé, la que le descubra que detrás de esa zapatera de carácter algo particular a la que le gustaba el fútbol se escondían las historias, y las luchas, de muchas otras. Una novela emocionante y delicada, íntima y a la vez universal, que se quedará contigo para siempre.

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