Sara Flamenco

«Si quieres adelgazar, lo mejor es el cardio». «El entrenamiento de fuerza es lo ideal para activar el metabolismo». ¿Y si el secreto estuviera en el término medio y combinar el cardio y la fuerza en cada entrenamiento? Eso es lo que cree Marcos Vázquez, creador de Fitness Revolucionario.

Así, este divulgador de temas relacionados con la actividad física, la nutrición y la salud, nos introduce desde sus redes sociales el concepto de atleta híbrido, que es quien «entiende la importancia de la fuerza y de la resistencia
. Y no sólo se ve bien, también rinde mejor y vive más», explica.

Qué es un atleta híbrido

Un atleta híbrido es aquel que entrena tanto fuerza como resistencia, logrando un equilibrio entre ambas capacidades. La combinación de ambas capacidades te dará un mayor rendimiento global, mejorará tu salud y longevidad y te dará una capacidad atlética superior, haciéndote más apto para todo tipo de disciplinas.

«Si levantas 100 kg en press de banca pero no puedes correr 5 km sin fatigarte, no estás en forma. Si corres maratones pero no puedes levantar tu propio peso en un peso muerto, no estás en forma»,
sentencia Marcos Vázquez en uno de sus post divulgativos en redes sociales.

Con esto, te quiere decir que la virtud en un entrenamiento se encuentra en un punto medio en el que se trabaje
tanto la capacidad cardiovascular como la fuerza. El cardio no te hará perder masa muscular y el entrenamiento de fuerza no te hará disinuir tu resistencia.

Cuál es el término medio

Si lo que más sueles hacer es entrenar tu musculatura, el experto te recomienda añadir
dos sesiones semanales de cardio, asegurando que esto no te hará perder masa muscular. «Si entrenas mucha fuerza, añadir dos sesiones semanales de cardio no te hará perder masa muscular. De hecho, te ayudará a recuperarte mejor después de cada serie, y te permitirá aplicar fuerza durante más tiempo. Además, mejorará tu salud cardiovascular», asegura.

Por otro lado, si lo tuyo es el cardio, Marcos Vázquez te aconseja añadir
dos sesiones semanales dedicadas al entrenamiento de fuerza. «Mejorará tu economía de carrera (menos consumo de oxígeno), al elevar la producción de fuerza musculares. Además, reducirás tu riesgo de lesión al fortalecer los músculos y tendones clave», concluye.

En el entrenamiento, lo mejor es que no seas reduccionista.
Combina el cardio y la fuerza para conseguir los beneficios de ambas disciplinas y así poder aprovecharte de todas tus capacidades al 100%. Porque si puedes levantar a tu hijo en brazos, pero no subir las escaleras hasta casa, algo no estás haciendo bien.