Elena Romero Vargas

Seguro que tú también has pensado muchas veces que tu armario está lleno de «
no tengo nada que ponerme
», o te has sorprendido al encontrar esos pantalones que dabas por perdidos desde hace décadas, o cuentas con multitud de «prendas de por si acaso» que llevas años sin sacar de ahí, o te has visto llegando tarde un evento por no dar con el estilismo ideal… Si estás situaciones te son familiares, siento decirte que el problema no es qué tienes en el armario, sino cómo lo tienes.

El orden de tu armario puede ayudarte más de lo que piensas a conseguir ese guardarropa elegante y versátil con el que todas soñamos. Y eso las japonesas lo saben muy bien. Si después de probar suerte tratando de construir un armario cápsula o sumando prendas minimalistas a las que sacarles más partido te encuentras en la misma situación, el truco de las 5s popular entre las japonesas es justo la solución que necesitas.

La regla se las 5s propone llevar un método basado en la organización y la disciplina también a tu armario con el objetivo de que adentrarte en él deje de ser un dolor de cabeza. Este método se divide en cinco pasos que, en japonés, son cinco palabras que empiezan con S. Traducido, el orden seria algo así como: clasificación, orden, limpieza, mantenimiento y compromiso.

Ahora que llega el momento de hacer el cambio de armario es buena ocasión para poner en práctica este truco. Empieza la temporada del buen tiempo con un guardarropa ordenado y funcional que podrás conseguir tan solo siguiendo este paso a paso:

1. Seirei: clasificación

El primer paso es separar la ropa a consciencia entre aquello que verdaderamente te sirve y lo que no. Para este paso hace falta un poco de mente fría, nada de «por si acasos»: todo lo lleves más de un año sin ponerte, va fuera. Un consejo para que este paso sea más visual y fácil de ejecutar es vaciar el armario entero y separar por montones entre lo que sí o sí se tiene que quedar, lo que aunque no te pongas mucho te gustaría conservar y aquello que va fuera sin dudas. Trata de ser objetiva y tener los menores miramientos posibles. Recuerda que, por norma general, el menos es más en una fórmula que nunca falla.

2. Seiton: orden

La mejor forma de ordenar tu ropa es seguir el método que te sea más cómodo para el día a día. Por colores, por prendas, en perchas o en cajones… el fin de este paso es conseguir un armario en el que tengas localizada toda tu ropa y, de paso, consigas un resultado armónico que te transmita paz y comodidad. Si no tienes muy claro cómo ordenar tu guardarropa, aquí va un consejo: pon más a la mano las prendas de ropa que más te pongas, de forma que esos días en los que se te echa el tiempo encima puedas dar con un look acertado sin mayor problema.

Mujer con look minimalista / launchmetrics spotlight

3. Seiso: limpieza

¿Hace cuánto que no limpias tu armario en profundidad? Y no hablamos de deshacerse de ropa, sino de un sentido más literal del termino limpiar. Por eso, antes de volver a guardar toda tu ropa, agarra los productos de limpieza necesario y adéntrate en esos rincones que llevan siglos sin ver un trapo. De esta forma, tu nueva relación con tu ropa comenzará desde la claridad y la tranquilidad que una limpieza en profundidad aporta a cualquier rincón de tu casa.

4. Seiketsu: mantenimiento

De nada sirve que pases un fin de semana a tope con esta tarea si, al momento de guardar tu siguiente colada, el desorden va a volver a ser el mismo. Por eso, lo que el método de las 5s propone es realizar jornadas de mantenimiento cada semana o cada 15 días. Es tan sencillo como cuidar el cómo guardas las prendas después de pasar por la lavadora o el hacer una revisión de lo que tienes cada vez que vayas de compras, tanto para saber cómo combinar las nuevas incorporaciones como para que, si es necesario, puedas deshacerte de otras piezas que en realidad no uses tanto.

5. Shitsuke: disciplina

Esta es la
palabra clave para llevar a cabo todo este proceso. Hace falta disciplina para dar el primer paso hasta arrancar con el método de las 5s, pero también para mantenerlo en el tiempo y recordarlo incluso los días de más pereza. Al final, cuando te acostumbres a relacionarte desde aquí con tu armario, te darás cuenta que más que un objetivo ideal es una forma de hacer tu vida más sencilla y de que la moda sirva para acompañarte y facilitarte los días desde el momento en el que te acercas al vestidor para elegir qué ponerte en cada momento.