El árbitro de Primera que iba a dirigir a un grande y fue parado por un grosero error

La Liga Profesional comunicó este jueves que Fernando Echenique no dirigirá el próximo fin de semana el encuentro entre Deportivo Riestra y San Lorenzo. La decisión disciplinaria fue adoptada a raíz del error que el árbitro cometió el miércoles, en el marco del encuentro entre Independiente Rivadavia y Estudiantes, por los 32avos de final de la Copa Argentina.

La equivocación de Echenique -quien será relevado por Fernando Espinoza en el cruce del próximo domingo- cobró corner en vez de tiro libre indirecto para el cuadro de Caseros luego de que Gonzalo Marinelli, arquero de los mendocinos, rechazara con sus manos un pase con los pies de su compañero Sheiko Studer. Un toque deliberado hacia atrás demasiado jugado que pudo haberse metido en el arco si el ex River no se hubiera estirado para despejar.

En ese contexto -y según trascendió- la Dirección Nacional de Arbitraje mostró internamente una altísima preocupación y un idéntico nivel de bronca por lo que ocurrió en el Juan Gilberto Funes de San Luis. Tal es así que habría circulado un comunicado interno en el que se señalan la toma de decisiones erróneas en una situación básica, reglamentariamente hablando.

El disgusto en el seno de la DNA no sólo está atado a lo que hizo Echenique, quien por haber sido el juez principal cargó con la responsabilidad máxima de las decisiones disciplinarias, sino también con sus asistentes y cuarto árbitro: ninguno de ellos interpretó lo que reglamentariamente debía hacerse ante una acción deliberada y clara en la que no talla la interpretación.

Resta saber, en ese contexto, si también habrá sanciones para Pablo Acevedo (asistente 1), Federico Cano (2) y César Ceballo (cuarto árbitro) en la actividad del próximo fin de semana. En el que Echenique, está claro, no actuará.

La normativa que entró en vigencia oficialmente en julio de 1992, en el marco de los Juegos Olímpicos de Barcelona, marca que se debe cobrar tiro libre indirecto “si un guardameta toca el balón con las manos o los brazos (…) después de que un compañero se lo haya cedido con el pie”.

La decisión de la International Board estuvo ligada a evitar que el arquero abusara del privilegio de agarrar el balón con sus manos. Una norma que ralentizaba el juego y era utilizada para ganar tiempo. Por tal motivo, fue derogada tras las deliberaciones posteriores a Italia 1990.

Echenique viene de protagonizar no sólo una acción controversial sino también una actitud canchera en el último Boca-Barracas Central: ante el reclamo de Edinson Cavani por un gol anulado, el juez había mandado a leer el reglamento al uruguayo. Un delantero que, por caso, tenía razón en su protesta: su conquista era lícita.

¿Cómo fue el gol que anuló Echenique? Un centro de Lautaro Blanco desde la izquierda cayó perfecto en el centro en el borde del área chica, un defensor de Barracas rechazó mal de cabeza y la pelota salió hacia arriba.

Ahí, el Matador protegió su posición con el cuerpo e hizo una pirueta en el aire para convertir, mientras el arquero visitante se lo llevó puesto y cayó.

El argumento de Echenique: Cavani endureció la posición al advertir que Ledesma se le venía encima y el arquero cayó después del contacto. Pero no hubo una intención del uruguayo de desplazar o sujetar al adversario, sino un choque.

No obstante, en los diferentes videos se ve claro que de parte de Edi no hubo ninguna intención de empujar o agarrar a Ledesma, sino que es el propio arquero el que sale con todo y se lleva puesto al Matador.