El terror lo solemos ubicar en el terreno de la fantasía, pero de un tiempo a esta parte los hechos reales se han vuelto un territorio a explotar, al menos los que tienen ambiciones de mayor éxito. El éxito de la saga del Warrenverso se ha vuelto modelo de coger personas que existieron y actividades paranormales reconocibles, y montar desde ahí un espectáculo.
El fenómeno del true crime también ha acercado los extremos de lo estremecedor y la realidad, creando éxitos continuos que, desgraciadamente, cada vez resultan más intercambiables y marcadamente sensacionalistas. De vez en cuando se rompe la tendencia y surge algo de rigor más marcado y perspectiva interesante, como ‘El baño del diablo’.
Atrocidades en el bosque
Esta película austriaca de los cineastas de la ‘Buenas noches, mamá’ original, Severin Fiala y Veronika Franz, fue una de las grandes cintas de terror aclamadas en el último año, consiguiendo ser reconocidas en festivales como Sitges recibiendo el título de mejor película. Austria la envió como candidata a los Oscars, pero no llegó a pasar el corte. Ahora se puede ver al fin en streaming a través de Filmin.
En la región centroeuropea, durante el siglo XVIII, la vida en los pueblos rurales profundos no es especialmente agradable. La represión moral y religiosa empuja a estilos de vida estrictos que no encajan para muchas mujeres. Algunas, como Agnes, intentan encontrar entusiasmo en el acto de volcarse en ser una devota esposa, aunque él tenga más aprecio por su libertad. Los días se vuelven una acumulación de angustia esperando a ser desatada.
En este contexto se introducen también los estremecedores casos de mujeres que secuestran bebés y los matan, esperando extramente ser condenadas por sus actos irredimibles. Estos casos son la base real de esta película que equilibra terror rural (aunque no fantástico) con crímenes reales, recogiendo escalofriantes casos de locura que parecen tener una explicación detrás (que no justificación).
‘El baño del diablo’: terror rural
El dúo austriaco vuelven a tantear límites del horror psicológico, explorando atrocidades con un aparente cinismo devastador. En ‘El baño del diablo’ entrelazan también el relato de época, además de un marcado ejercicio de perspectiva subjetiva para, al menos, aproximarnos a ese estado depresivo que personajes como Agnes podían experimentar en ese contexto.
Una película construida con paciencia y atmósfera, sin buscar necesariamente el susto de impacto, sino ir introduciéndose debajo de tu piel con puro relato. Incluso aunque vuelvan a mostrar que necesitan pulir mejor las aristas de su historia, para no acercarse tanto y de forma peligrosa a la explotación, es un formidable ejercicio de género que merece ser descubierto.
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