Lidia A. Costa

Teresa Urquijo, aristócrata de 27 años, era una perfecta desconocida para el común de los mortales hasta hace apenas un año. Y hoy, tras su boda con el alcalde de Madrid, es ya un ejemplo de elegancia para muchas mujeres que admiran su forma de vestir.

Aunque se prodiga poco en público, la experta analista financiera acompaña a su marido en algunos de los actos propios de su cargo, y siempre se lleva halagos por sus looks. ¿Algo en común entre todos ellos? El aire bohemio y pijo que comparte y que ya ha creado escuela de fans.

La joven, que está emparentada con el rey don Juan Carlos y es muy amiga de Victoria Federica y de su prima e íntima Victoria López-Quesada, protagoniza mejor que nadie ese estilo siempre acertado, con vestidos de estampados y siluetas boho y accesorios especiales que muchas jóvenes –y no tan jóvenes– imitan.

El estilo de Teresa Urquijo: prints bohemios, pendientes y siluetas amplias y austeras

La joven aristócrata, que tiene 27 años, destaca por su estilo discreto y natural. Y sin estridencias. Adora los estampados de colores, y para los accesorios suele decantarse por diseños más sencillos y monocolor. Coincide con muchas otras «niñas bien» de la alta sociedad en sus claves estilísticas. Y en el caso de Urquijo son básicamente las siluetas austeras –nada sexys y muy elegantes–, amplias y aderezadas con accesorios como los cinturones dorados o los grandes pendientes para regalarles una dosis de sofisticación muy escasa pero perfecta para ella.

Teresa Urquijo con un vestido estampado azul. / GTRES

La esposa del alcalde de Madrid José Luis Martínez-Almeida, con quien se casó el pasado 6 de abril en una boda que superó todas las expectativas, ya demostró en su enlace que es una joven que adora la elegancia, la sencillez y la austeridad máxima a la hora de vestir.

Su comentado look nupcial, que fue una actualización del vestido que llevaron su madre y su abuela realizada por el taller madrileño Navascués –uno de los preferidos de las novias de la alta sociedad y la aristocracia– representó la quintaesencia del estilo de la joven. Largo hasta los pies, también con manga larga, cuello alto, contaba también con la abertura mínima en la falda para poder caminar y bailar. Por cierto, ¿cómo olvidar ese chotis que protagonizó con Martínez-Almeida y que se hizo viral…?.

Teresa Urquijo hizo una declaración total de intenciones el mismo día de su boda: se viste para ella misma, no sigue las tendencias, tiende al clasicismo y opta siempre por la sencillez y la naturalidad. Además, no es especialmente fan de los «joyones», y llama poderosamente la atención un detalle muy original que dice mucho de su naturalidad y estilo sin artificios: suele llevar siempre un reloj con llamativa correa de color rojo, incluso con estos looks de invitada que luce en citas especiales como los toros u otros eventos destacados.

Vestido con escote redondo, de BABBAKI (129 €). Pendientes largos con flor en resina, de PARFOIS (25, 99 €). Anillo con circonitas, de CAINTÈ (75 €). Vestido corto amplio, con volante, de SFERA (35, 99 €). Zapato destalonado con adorno de hebilla en el empeine, de HISPANITAS (119, 90 €). Bolso Constanza, en piel grabada, de PHIALEBEL (395 €). Zapato Greta destalonado con puntera afilada y detalle de minihebilla, de MASCARÓ (229 €). / mujerhoy

Y lo combina sin miedo con pendientes grandes y llamativos con borlas y flores de hilo o cinturones metálicos. Además, recordemos que pertenece a dos familias aristócratas y que, por eso, podría haber llevado tiara a su boda, como han hecho la mayoría de sus primas. Pero ella renunció a este tipo de joyas familiares decantándose por un look nupcial en el que reinaba la naturalidad, la sencillez y la austeridad. Totalmente fiel a ella misma.

Teresa Urquijo y su look icónico para acertar: versiones «refinadas» del caftán y chales

La joven analista comparte con su marido muchas aficiones, entre ellas los toros. Y ha sido en eventos de tipo taurino donde más se la ha visto en las últimas semanas luciendo estilismos que llaman la atención por su sencillez a la vez que destacan por su colorido y estampado. A estas alturas ya podemos confirmar que Urquijo adora los vestidos, sobre todo los que se inspiran en la silueta y estampados de los caftanes. Con manga larga o corta, es asidua a firmas como Scalpers o Byan, ambas firmas fectiche entre las pijas con más estilo.

Teresa Urqujo con un vestido boho-chic. / GTRES

También hemos podido verla con trajes de chaqueta y pantalón, una opción que lució en el pasado Masters de Tenis de Madrid y que combinó con zapatillas, al «estilo Letizia». De igual modo, alguna ocasión se ha decantado por conjuntos de camisa y pantalón tipo pijamero y con los mismos prints bohemio que lleva en sus característicos vestidos.

Y un detalle curioso es que Urquijo suele recurrir al clásico chal para cubrirse en vez de optar por formas de abrigarse más fashion y tendencia, a la vez que actuales, como las blazers o los trechs. Pero lo cierto es que si tuviéramos que escoger una pieza icónica en su armario sin duda sería el vestido de inspiración camisero, con botones frontales, o caftán en versión refinada, eso sí.

Vestido con cuerpo cruzado, de ZARA (49, 95 €). Pendientes en latón con acabado en oro, de ACUS (38 €). Reloj Big Bold Irony, con caja de acero y correa de caucho, de SWATCH (195 €). Alpargatas Laia, con pulsera al tobillo, de TONi PONS (75 €). Bolso de mano efecto rafia, de PARFOIS (19, 99 ). Alpargatas en ante bicolor, de MACARENA, 84, 90 €. / mujerhoy

Porque como otras jóvenes de la alta sociedad conocidas, Teresa Urquijo es dueña de un estilo boho pero pijo. Nada de motivos o estampados que remitan en exceso a lo étnico o bohemio en exceso. Tanto la mujer del alcalde como otras «niñas bien» como Victoria Federica de Marichalar, Sassa de Osma o Belén Corsini son ejemplos de este estilo relajado y chic pero que huye de las prendas autóctonas.

Nunca las veríamos con un caftán auténtico de Marruecos o de La India, por poner un par de ejemplos. Ellas prefieren recurrir a las firmas que se hacen famosas entre estas jóvenes estilosas y acomodadas inspirándose para sus diseños en otras culturas. Pero eso: solo inspirándose. Y lo cierto es que con mucho éxito.