Tamara Falcó e Íñigo Onieva ya son marido y mujer –
así va a ser su nueva vida-. ¡Por fin! La cita más esperada del momento ha llegado a su fin y poco a poco nos están llegando todos y cada uno de los detalles de enlace del año. Y sí, el que más expectación generaba, sin lugar a dudas, era el vestido de novia de Tamara.
Y como era de esperar, no solo ha habido un look, sino varios. Tamara ha gestionado al detalle todas y cada una de las apariciones en el marco de la boda. Y ha triunfado en la preboda, en la ceremonia, en la fiesta, en el brunch de después… Tenemos todas las prendas que ha llevado la marquesa de Griñón. ¡Fíchalas todas!
El look de la preboda
Para la preboda, Tamara Falcó demostró lo mucho que le gusta la colección que ella misma ha diseñado junto a Pedro del Hierro y apostó por un traje de esta colaboración. Era un diseño de pantalón recto de talle alto, con blazer cropped y blusa con lazada. Todo en un total white que acompañó de una blusa con lazada, joyas de Tous y un bolso y zapatos de Aquazzura.
El conjunto lencero con el que se preparó
Para los preparativos en la finca El Rincón, justo antes de vestirse y pasar por el altar, Tamara Falcó eligió un conjunto de camisón y bata y de la firma Namur con ES Fascinante, diseñado y personalizado especialmente para ella. Un diseño de satén de lo más elegante.
El vestido de novia, el más esperado
Todos querían ver el vestido de novia elegido por Tamara y el resultado final ha sorprendido y generado todo tipo de opiniones. La marquesa, de la mano de Wes Gordon, director creativo de Carolina Herrera, lució este vestido de
inspiración royal y medieval con manga francesa escote en forma de pico y un bordado metalizado que recorría de manera vertical toda la prenda.
Un diseño al que le han sacado parecido con el que llevó la reina Letizia, pero también Carmina Ordoñez o Carmen Martínez Bordiú. Tamara quería un look regio, aristócrata y digno de princesa y lo consiguió. Lo acompañó además de una tiara y un velo. Más clásica imposible.
El segundo vestido de novia, mucho más especial
Tras la ceremonia y para disfrutar de la fiesta, Tamara escogió un diseño más sofisticado y especial. También firmado por el diseñador de Carolina Herrera, este era un diseño en un nude rosado, con palabra de honor, cuerpo adornado por un lazo y una falda larga con volantes verticales.
Era un vestido romántico, confeccionado en organza y mucho más vaporoso que el primero. En este momento, se deshizo de la tiara y el velo y completó el estilismo con unas sandalias de tacón doradas y una coleta baja. ¡Nos encanta!
El vestido de encaje de la fiesta
Para volver de la fiesta en la que lo dio todo y poder seguir luciendo de novia, pero en una versión más cómoda e informal, Tamara escogió un vestido de encaje de Zimmermann, un diseño de manga larga, ajustado y cuello redondo que acompañó de unas sandalias de Birkenstock en color blanco.
El último evento de la boda fue un brunch que Tamara e Íñigo celebraron en el Ritz para algunos de los invitados, sobre todo, estuvieron amigos y familiares más allegados. Para esta cita más informal, la novia optó por un vestido de lunares en color verde botella y blanco de Johanna Ortiz. ¿Cuál es tu look favorito?