Sara Flamenco

Por si no vives en este planeta y todavía no te habías enterado, Tamara Falcó se casa. Después de superar sus desavenencias y darle una oportunidad al amor,
la Marquesa de Griñón contraerá matrimonio con Iñigo Onieva y para estar a punto ha decidido pasar por chapa y pintura en la exclusiva clínica Buchinger de Málaga, a la que acaba de llegar con intención de hacer un regimen estricto durante unos 10 días. Pero no estará sola, ya que su madre, Isabel Preysler, ha decidido acompañarla en su retiro de belleza y salud.

La novia ha decidido someterse a un ayuno terapéutico, no para perder peso antes de la boda, sino para depurar el organismo (aunque después de estar tantos días sin comer, seguro que algún que otro kilo cae). Isabel también se ha apuntado a este plan detox, pero sin pasar tantas penurias como su hija, que no le hace ninguna falta.

La dieta de Isabel Preysler en la clínica Buchinger

Algo nos dice que en esta decisión de
Isabel Preysler ha contado más pasar tiempo con su hija que cuidar su alimentación, ya que la dieta que seguirá en la lujosa clínica no dista mucho de la que tiene habitualmente. La socialité mantiene una cuidada alimentación basada en frutas, verduras, legumbres y cereales integrales, evitando el azúcar y los lácteos y limitando las carnes rojas. Gracias a este tipo de alimentación, Isabel se mantiene delgada y su piel luce joven, luminosa y tersa.

Isabel Preysler y su hija, Tamara Falcó. / Gtresonline

Pero en Buchinger no sólo cuenta la alimentación, sino que ofrecen una amplia gama de actividades y tratamientos de belleza que convierten la estancia en un respiro para el cuerpo. Así que no nos extraña que haya decidido acompañar a su hija a este retiro. Refuerzan sus lazos y se relajan, todo en uno.

Isabel Preysler se ha adherido al menú integral ovo-lacteo-vegetariano, pero evitando los lácteos en su caso. Así pues, la única diferencia con la dieta que mantiene en su casa es que consumirá alimentos con mayor índice glucémico al mediodía (como las frutas y algunos tipos de verduras), evitándolos por la noche.

Tamara Falcó llega al aeropuerto de Málaga. / gtres

Entre las actividades que podrá elegir durante su estancia en la clínica están el yoga, el pilates, el senderismo, conciertos de música, tratamientos de spa, cursos de meditación y relajación y otras actividades lúdicas como el taller de arte o el de cocina. Y, aunque suene a broma, otra de las actividades de obligado cumplimiento en Buchinger es dormir la siesta, ya que fomenta la función hepática con la ayuda de una compresa caliente sobre el abdomen.

Ayuno terapéutico, la dieta de Tamara Falcó para su boda

La hija de Isabel Preysler y Carlos Falcó ha decidido ingresar en Buchinger, no sólo para quitarse unos kilos de cara al gran día, sino también para mejorar su cuerpo, su piel y su mente. De hecho, Tamara se ha mostrado indignada con lo publicado por diversos medios: «El vestido me lo hacen a medida y, por lo tanto, está hecho a mi cuerpo. Menuda tontería y falta de respeto. Yo estoy en mi »normopeso«, comentó, molesta, en El Hormiguero.

Isabel Preysler, en un evento de Pedro del Hierro. / Gtresonline

La marquesa está claramente enfadada, y se nota. «Para bajar esos kilos tendría que estar un año. ¿Qué podría estar más delgada? Pues sí. Pero vamos, que lo encuentro todo un poco indignante. Como ya he dicho varias veces, para mí lo importante es el sacramento del matrimonio«, dijo en el programa del que es colaboradora.

Pero claro, cuando te vas a someter a un programa de ayuno de 10 días, se entiende la confusión de los medios. Bien es cierto que la exclusiva clínica de Málaga no lo oferta como una dieta para adelgazar, pero comer sólo líquidos durante tantos días tiene como consecuencia directa la pérdida de peso.

El programa de ayuno de 10 días al que se va a someter Tamara Falcó consiste en un día de preparación, seis días de ayuno y tres días de reintroducción de alimentos o readaptación. La comida es fresca, local y orgánica, y se complementa con tés de hierbas, caldo de verduras recién hecho y zumos de frutas exprimidos.

Además, se incluye la ingesta de las
sales laxantes, las sales de Glauber, con las que se consigue vaciar el aparato digestivo y la limpieza de colon. ¿Y qué pasa después? Tras esta purga tan exclusiva, comienzan a introducir los alimentos sólidos poco a poco, sobre todo platos elaborados con verduras muy poco calóricos.