Raquel Rodríguez

El vestido de la reina Letizia hoy en la Coronación ha puesto de manifiesto lo que todos ya sabíamos: que es le más monarca más elegante de la realeza eurpea y mundial. Ya lo demostró durante la recepeción previa al acto de coronación de Carlos III: Letizia está a años luz de las otras royals, estilísticamente hablando. Un espectacular vestido verde -con guiño británico incluido- hizo que la monarca deslumbrara y se colocara como la reina mejor vestida de Londres hoy.

Y sí, como ya esperábamos, durante la ceremonia de coronación celebrada en la Abadía de Westminster, el look de la reina Letizia ha vuelto a ser el mejor, con permiso de Kate Middleton que asistía a la coronación de Carlos III junto a sus hijos, los príncipes George y Louis y la princesa Charlotte que han terminado por acaparar todas las miradas regalándonos las fotos más simpáticas de la jornada.

Este era un día para lucirse y nuestra reina no solo ha cumplido expectativas, sino que, una vez más, las ha superado con un look de invitada muy especial del que tenemos todos los detalles.

Y, ¿cómo lo ha hecho? Pues recurriendo al que es su color favorito de los últimos meses: el rosa. Ya confirmamos hace tiempo que la monarca había dejado a un lado el color rojo -el que había sido su mejor aliado estilístico- y había hecho de este nuevo tono su favorito ya que con el, al parecer, se ve más favorecida. Mientras que Máxima de Holanda, vestida de blanco, se ve mejor con escote de filigranas.

Letizia con un vestido de Carolina Herrera

El rey Felipe VI y la reina Leizia llegando a la coronación de Carlos III. / GTRES

Pero la cosa no queda ahí. Para acertar de lleno, la reina no solo ha optado por el rosa como elemento de confianza, también ha escogido una de sus firmas favoritas: Carolina Herrera. Y el resultado ha sido un estilismo de matrícula de honor que ha gustado muchísimo y que ha sacado la versión más elegante y sofisticada de doña Letizia.

El protagonista era un vestido de largo midi formado por una falda recta que quedaba por debajo de la rodilla de la monarca y que iba unida a un cuerpo de manga larga y cuello redondo con un peplum, es decir, un volante pequeño que rodeaba la cintura y marcaba su silueta. Un detalle que también llevó en el vestido de la cena de gala junto al presidente de Colombia celebrada hace unos días.

Los reyes de España en la Abadía de Westminster. / gtres

La parte superior del diseño estaba adornada también con un bordado floral en los hombros y el pecho y un cierre de botones. Sin embargo, el detalle protagonista y, en consecuencia, el más comentado fue la pamela. La etiqueta requería que las mujeres lucieran tocado y la reina cumplió con uno de los más originales de la cita.

El tocado: una pamela made in Spain

En todas las citas que se ha exigido el tocado como dress code, la reina ha optado por piezas más pequeñas y sencillas. Sin embargo, para esta ocasión, la monarca se ha atrevido con una pieza mucho más especial y original. Y lo ha hecho recurriendo a Balel, una firma madrileña de sombrería artesanal que llevó también en
el look para el homenaje al duque de Edimburgo también celebrado en Londres.

La pieza en cuestión era un tocado tipo pamela confeccionado en rafia en tono natural y que iba adornado de un tejido de rejilla y plumeti en la parte superior en color rosa, a juego con el vestido. Una pieza de diseño ovalado que quedaba ladeada sobre un recogido bajo y que elevó este look de doña Letizia.

Los pendientes de la reina Victoria Eugenia

Para completar el estilismo, doña Letizia añadió unos salones destalonados y un bolso de mano rígido en el mismo color del vestido y ambos de Carolina Herrera y unos guantes beige. Por último, el accesorio más importante: unos pendientes de la reina Victoria Eugenia.

Ha sido la única joya que ha escogido la reina consorte y con ella ha llegado el guiño estilísitco que siempre suele hacer. Se trata de un par de pendientes con un brillante grueso y brillantes alrededor que forma parte de la colección de las joyas de pasar. Unas piezas que formaron parte del lote de joyas que Alfonso XIII encargó a la joyería madrileña Ansorena para regalar a su prometida, Victoria Eugenia de Battenberg, nieta favorita de la reina Victoria de Reino Unido