El uruguayo Darwin Núñez había arrancado con el pie derecho en Liverpool. En sus primeros dos partidos (uno por la Community Shield y otro por la Premier) había logrado inscribir su nombre en la red. De a poquito, el delantero había empezado a pagar con goles el gran esfuerzo económico que hizo el equipo inglés, abonándole 75 palos (más otros 25 millones de euros en variables) al Benfica de Portugal. Sin embargo, en su primer partido como titular, se mandó una flor de macana y vio su primera roja en la Premier.
LA EXPULSIÓN DE NÚÑEZ
¿Qué pasó? Iban 11 minutos del segundo tiempo, cuando el defensor danés Joachim Andersen empezó a discutir con Núñez. Y la cosa pasó a mayores cuando lo empujó y Darwin reaccionó: se dio vuelta y le metió un cabezazo. ¿Cómo? Se encogió un poquito y le apuntó directo al mentón. El zaguero cayó al suelo, exagerando un poquito, pero la sanción fue inevitable: expulsión para el atacante en pleno Anfield.
Núñez se tuvo que ir a las duchas antes de tiempo. En su salida del campo de juego, Klopp ni lo miró. Desde luego, al DT no le habrá causado gracia la reacción del charrúa y, mucho menos, que Liverpool se quedara con diez hombres.
EL CABEZAZO DE ORTEGA A VAN DER SAR
El cabezazo de Ortega al arquero neerlandés (AP).
El cabezazo terminó siendo muy parecido al de Ariel Ortega -también fue expulsado- al arquero neerlandés Edwin Van der Sar en los cuartos de final del Mundial de 1998. Argentina terminó eliminada al caer por 2-1.
