“Hay docentes que dejan las horas y otros empiezan a dudar si seguir arriesgando la vida por unos pocos pesos”.
El razonamiento pertenece a un miembro de la comunidad educativa del Anexo del Profesorado en Lengua y Literatura que se dicta en horario nocturno en la escuela Santiago del Estero, en Villa El Libertador. Y refiere a la problemática de la inseguridad que se vive en la educación del barrio.
“En el último episodio, tres docentes quedaron en el medio de una balacera cuando fueron a tomar el colectivo en calle La Falda. Al otro día, algunos de ellos pretendía renunciar a las horas pero por suerte logramos que se calmara porque nuestro objetivo es mantener calidad educativa, pero es difícil”, reseña la misma fuente a La Décima.
Los docentes acuerdan estrategias para prevenir la inseguridad como mantener la puerta del colegio cerrada todo el tiempo y salir juntos al término del horario de clases, cerca de las once de la noche.
“Intentamos hacer todo lo humanamente posible para cuidarnos juntos pero no alcanza, necesitamos una respuesta del Estado”, graficó la fuente consultada.
El lunes pasado, padres y docentes del turno mañana y tarde la escuela Santiago del Estero plantearon a los medios la inseguridad que viven a diario, no solo afuera del colegio, sino adentro ya que hubo episodios de malvivientes queriendo entrar al colegio en pleno dictado de clases. La escuela, además, suele ser el blanco de vandalismo, de sujetos que entran a robar y destrozar.
“Basta de niños y maestros con miedo”, reza un cartel pegado en una de las paredes del patio de la escuela, resumiendo el sentir general de la comunidad educativa.
“Si los delincuentes hacen lo que hacen en horas del día, no nos imaginamos lo que pueden llegar a hacer durante la noche”, apunta la fuente del Anexo de Lengua y Literatura.
Es por eso que la comunidad movilizada está solicitando una guardia permanente en el sector. Por ahora, lo que acordaron con la Policía es el compromiso de patrullar en los horarios de entrada y salida de los alumnos al establecimiento, situación que en la jerga se conoce como “código blanco”.
La problemática de la inseguridad fue planteada y discutida en dos clases abiertas al público por alumnos y docentes del Anexo.
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