En la novena fecha de la Championship dos fanáticos del Sheffield Wednesday fueron captados por una cámara en el momento en el que se burlaban de los hinchas de Sunderland usando una foto de Bradley Lowrey, un niño de seis años que falleció luego de perder una larga lucha contra el cáncer.
Una vez que trascendieron las imágenes, la mamá del nene publicó un mensaje en su cuenta de Facebook para repudiar este terrible acto. «Es muy triste para mí ver esto. Lo que pasó con el cáncer no tiene colores, y mucho menos el respeto por una familia que perdió a su bebé a causa del cáncer. Bradley era y sigue siendo muy querido en la comunidad del fútbol, por lo que estaré eternamente agradecida, pero debo pedir que todos dejen que la policía haga su trabajo y se ocupen«, sentenció.
Según confirmó el diario británico The Sun, ambos fueron detenidos y podrían enfrentar cargos por delitos en contra del orden público. Actualmente se mantienen bajo custodia.
Finalmente, el club se hizo responsable y también lanzó un comunicado: «Somos conscientes de las imágenes que circulan y hemos iniciado una investigación inmediata junto con la policía de South Yorkshire. Condenamos rotundamente este comportamiento escandaloso y absolutamente deplorable. Solo podemos disculparnos por la indudable angustia causada a la familia y amigos de Bradley«.
Este triste caso conmovió por completo a los fanáticos de la Premier League hace seis años atrás. Incluso el futbolista Jermain Defoe lo apadrinó y lo acompañó durante gran parte de su proceso, generando un tierno vínculo y acompañándolo hasta su último día.
