Hemos crecido viendo a Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York (y, ahora, en And just like that) y alcanzamos la madurez dando likes en Instagram a un buen puñado de influencers con armarios imponentes. No sabemos si es (solo) por eso, pero la realidad es que todas hemos soñado en algún momento de nuestra vida (o en muchos) con tener un vestidor de ensueño como esos que acumulamos guardados en uno de nuestros tableros de inspiración de Pinterest.
El problema, como tantas otras veces, es que la realidad no siempre se parece a la ficción y en nuestras casas no tenemos sitio suficiente para destinar una habitación exclusivamente a nuestra ropa. O sí… Porque no nos cansamos de repetir que el tamaño, en decoración, no importa, y a veces un pequeño rincón se puede convertir en el vestidor perfecto.
El famoso vestidor de Carrie Bradshaw en Sexo en Nueva York.
Tres ideas de IKEA para hacer un vestidor bonito, barato y práctico
Armarios abiertos al dormitorio, vestidores que ocupan su propia habitación, walk-in-closets, soluciones de almacenaje que actúan, además, como divisores de espacio entre dos estancias de la casa… Las opciones que podemos encontrar y crear son muchas y, ahora que llega el cambio de estación y toca hacer el cambio de armario, es un buen momento para revisarlas y adaptarlas al espacio y las necesidades de cada una.
Lo primero que debemos hacer es tener claro qué queremos y, sobre todo, qué necesitamos. Es cierto que IKEA pone a nuestra disposición herramientas de diseño que lo hacen mucho más fácil, pero antes de llegar a ese punto tienes que tener claro cuáles son tus necesidades reales: ¿necesitas más espacio para colgar prendas o cajones y armarios con puertas cerradas? ¿Cómo vas a querer organizar los zapatos y bolsos? ¿Y los complementos y joyas?
Si tienes una habitación para construir un vestidor…
Si eres de esas afortunadas que dispone de una habitación exclusiva para crear tu vestidor, nos quedamos con las múltiples opciones que nos da la línea PAX de IKEA, un sistema de módulos de armarios, cajoneras y estanterías que te permite optimizar al máximo el espacio y adaptarlo a tus necesidades porque puedes personalizar el tamaño, el color, las puertas y la disposición de los organizadores de interior.
Vestidor de IKEA con armarios PAX.
Además, sus líneas sencillas, versátiles y atemporales lo hacen muy fácil de combinar con un sinfín de muebles y complementos low cost de IKEA. Por ejemplo, podemos añadir elegantes puertas GRIMO con molduras o el modelo en vidrio BERGSBO. Si queremos vestirlos por dentro muy poco dinero, podemos optar por las cajas de almacenaje SKUBB o añadir a la estancia, en forma de isla central, cómodas y cajoneras KULLEN o las famosas BRIMNES o HEMNES.
Si tienes un walk-in-closet…
Mi madre dice que un walk-in-closet no es un vestidor, es un armario grande sin puertas. Le pongamos el nombre que le pongamos, lo cierto es que esta modalidad está cada vez más extendida y cumple, en mayor o menor medida, nuestro sueño de tener un vestidor al más puro estilo Carrie Bradshaw.
Wal-incloset de IKEA con estructuras BOAXEL.
La clave para sacarle el máximo partido es vestirlo de forma funcional y, aunque hay un sinfín de opciones, esta vez apostamos por una versión abierta, sin puertas, que amplíe visualmente el espacio sin caer en el temido ‘efecto pasillo’. Nuestra propuesta es muy sencilla y barata: combinamos estructuras BOAXEL con cestas y baldas con barras para colgar ropa MULIG (también podemos optar por burros de la misma línea) y unos zapateros TRONES. Colocar un espejo en una de las paredes conseguirá, además, que parezca aún más grande.
Si tienes un armario abierto a la habitación…
Si tienes un armario empotrado en la habitación y quieres convertirlo en un pequeño vestidor, lo tienes muy fácil. Solo hay que quitar las puertas y abrir el espacio al dormitorio, consiguiendo así que la habitación parezca más grande. Eso sí, necesitarás tenerlo todo bien ordenado SIEMPRE…
Armario abierto con accesorios KOMPLEMENT de IKEA.
En este caso, la mejor opción para vestirlo es apostar por la sencillez y el menos es más. Fácil y rápidode construir, te proponemos que lo armes con accesorios de la línea KOMPLEMENT, que tiene barras colgadoras, pantaloneros y baldas baratísimos (entre 9 y 15 euros). Si quieres darle un toque de estilo, añade unas cuantas cestas de madera, mimbre o rafia (los modelos SMARRA o BRANÄS son perfectos) en contraste para guardar ropa interior o complementos, y coloca unas cortinas de tela que harán una doble función: aportan color y, al mismo tiempo, te permiten cerrarlo sin quitar espacio cuando el caos se adueñe temporalmente de tu vestidor.
