El yoga combina las asanas, posturas físicas, con el trabajo de respiración y meditación. La conjunción de estas prácticas aportan grandes beneficios para el cuerpo, pero también para la mente. A través de la respiración, que en yoga es el puente para conectar estos dos ámbitos del ser humano, puede llegar a mejorar sustancialmente problemas de salud mental e incrementar la calidad de vida.
Cómo mejora el yoga tu salud mental
Aunque no sea la solución definitiva para estos problemas, los expertos concuerdan que es una gran herramienta de la que puedes servirte para aliviar el estrés, la ansiedad o la presión. Los estudios realizados al respecto demuestran que las personas que practican el yoga gozan de un mejor estado de ánimo y, además, contribuye a mejorar las relaciones sociales.
Entre los beneficios de esta práctica está la estimulación del sistema nervioso autónomo. Este sistema es el encargado de reaccionar ante los distintos estímulos, y se encarga de regular procesos como la digestión o los ciclos del sueño, de los principales afectados cuando los niveles de estrés en el cuerpo se disparan.
Como disminuye los niveles de cortisol, la hormona del estrés, actúa favorablemente a la hora de aliviar la ansiedad y hasta la depresión o los ataques de pánico. Las patologías psicológicas que son tratadas mano a mano con la práctica del yoga tienen muchas más probabilidades de mejora que las que carecen de ella.
El yoga se focaliza tanto en la respiración y enseña a mantenerse en el momento presente, por lo que permite reforzar la conexión con uno mismo. Gracias a esto, quien practica yoga regularmente aprende a interpretar las señales del cuerpo y los procesos mentales. De esta forma, es mucho más fácil detectar un pensamiento intrusivo que puede ser desencadenante de problemas de ansiedad.
Al inmiscuirse de lleno en esta tarea, las personas que practican yoga alcanzan niveles más altos de
autoconocimiento y consiguen mayor claridad de pensamiento. Vivir en el presente, ser capaz de focalizarse en la propia respiración y tener presente estas claves dentro y fuera del ejercicio contribuyen a favorecer el autoestima, conectar con los pensamientos inconscientes y lograr una mayor claridad de pensamientos.
Ventajas de reducir el estrés con la meditación
Además, el yoga puede ser una
gran técnica de relajación. Ante situaciones de la vida que pueden ser desencadenantes de estrés, llegar a estos niveles de autoconocimeinto y de control sobre la situación ayuda a relativizar y a separar lo que es un problema real de lo que es fruto de la sobreactividad de la mente.
El yoga también aporta beneficios a nivel social. Una vez que se consigue este estado de paz y tranquilidad, se rebajan los niveles de cortisol y se estimula el funcionamiento del sistema nervioso autónomo, la persona que practica yoga mejorará exponencialmente sus habilidades sociales. Esa calma que le ha sido transmitida por el ejercicio se refleja en el trato con otras personas y consigue crear un ambiente de paz y tranquilidad que contagia a todo su entorno.
Todos estos beneficios contribuyen, en mayor o menor medida, a
mejorar la salud física y mental. Tanto en cuestiones del día a día como en patologías más severas, como puede ser las adicciones, los problemas en el embarazo o los trastornos de conducta alimentaria, la buena práctica del yoga aporta un plus de estabilidad y seguridad que ayudarán a mantener a raya la salud mental.
