El presidente de Flamengo se quejó de la participación del campeón de la Libertadores en la Copa Intercontinental

Mientras todo Flamengotodavía festejaba la cuarta Copa Libertadores dentro del campo de juego del Monumental de Lima, Luiz Eduardo Baptista, presidente del Mengao, apuntó directamente a la Copa Intercontinental, próximo gran objetivo internacional de su equipo y fue muy crítico con la logística del torneo.

Flamengo debutará en el certamen el próximo 10 de diciembre, frente a Cruz Azul, en el ya denominado Derbi de las Américas. Es decir, apenas tres días después de la última fecha del Brasileirao, que tiene a Mengao como candidato al título. Con este cronograma, la llegada del Fla a Qatar está prevista para el 8 de diciembre, dos días antes del trascendental encuentro y sólo un día después de la definición en Brasil.

Y justamente a lo ajustado de la agenda apuntó Bap luego de la consagración en Lima: » Creo que la Copa Intercontinental es absolutamente injusta. Llegaremos con menos de 20 horas de antelación y perderemos dinero si nos eliminan en la ida. Mirá lo que le pasó al Botafogo el año pasado».

En la misma línea, agregó: «El otro día hablábamos del Fair Play Financiero. ¿Y el Fair Play Deportivo? No está bien que el equipo campeón de la Libertadores llegue a jugar con menos de 24 horas de antelación, haga un viaje de 15 horas, con 7 horas de diferencia horaria… Hoy disfrutaremos y el lunes decidiré qué haremos».

En caso de superar a Cruz Azul, Flamengo irá ante Pyramids (Egipto), tres días después, el 13 de diciembre. Y el vencedor de ese partido enfrentará, el 17 de diciembre al PSG, campeón de la última Champions.

«Filipe Luís forma parte de esto, es un tipo absolutamente especial. Creí en él cuando asumí el cargo, y sigue con nosotros. Si fuera por mí, claro que se quedaría, pero como todo matrimonio, depende de dos personas», aseguró cuando le consultaron por la continuidad del DT.

Además, agregó: «Pero creo que también quiere venir por mucho más. S i tuviera que apostar, apostaría a que se queda. No pagaría mucho porque es como predicar a los ya convencidos (risas). Que Ceará venga, día a día».